Monición de entrada
Queridos hermanos, tenemos el honor de recibirles en la casa de Dios para celebrar juntos la santa misa, con la que cerramos la cuarta semana de Cuaresma. Sean todos bienvenidos.
La cercanía de las celebraciones pascuales nos van introduciendo en la meditación de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. Celebremos con fe y devoción esta santa misa, a fin de prepararnos cada día mejor para la gran fiesta de la Pascua.
Con esas intenciones, comencemos esta misa con el canto de entrada. De pie, cantemos todos.
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Moniciones a las lecturas
Monición a la primera lectura (Sabiduría 2, 1a.12-22)
La primera lectura de hoy, tomada del libro de la Sabiduría, es una muestra de las confesiones autobiográficas del profeta Jeremías, que se siente rechazado por sus compatriotas.
PRIMERA LECTURA
Lectura del libro de la Sabiduría 2, 1a.12-22
Se dijeron los impíos, razonando equivocadamente:
«Acechemos al justo, que nos resulta incómodo:
se opone a nuestras acciones,
nos echa en cara nuestros pecados,
nos reprende nuestra educación errada;
declara que conoce a Dios
y se da el nombre de hijo del Señor;
es un reproche para nuestras ideas
y sólo verlo da grima;
lleva una vida distinta de los demás,
y su conducta es diferente;
nos considera de mala ley
y se aparta de nuestras sendas como si fueran impuras;
declara dichoso el fin de los justos
y se gloría de tener por padre a Dios.
Veamos si sus palabras son verdaderas,
comprobando el desenlace de su vida.
Si es el justo hijo de Dios, lo auxiliará
y lo librará del poder de sus enemigos;
lo someteremos a la prueba de la afrenta y la tortura,
para comprobar su moderación
y apreciar su paciencia;
lo condenaremos a muerte ignominiosa,
pues dice que hay quien se ocupa de él».
Así discurren, y se engañan,
porque los ciega su maldad;
no conocen los secretos de Dios,
no esperan el premio de la virtud
ni valoran el galardón de una vida intachable.
Palabra de Dios.
Monición al salmo responsorial (Salmo 33)
Con el salmo 33, alabemos a Dios porque siempre está cerca de todo aquél que sufre, y digámosle todos:
Salmo responsorial: Salmo 33, 17-18. 19-20. 21 y 23
R. El Señor está cerca de los atribulados.
El Señor se enfrenta con los malhechores,
para borrar de la tierra su memoria.
Cuando uno grita, el Señor lo escucha
y lo libra de sus angustias. R.
El Señor está cerca de los atribulados,
salva a los abatidos.
Aunque el justo sufra muchos males,
de todos lo librará el Señor. R.
Él cuida de todos sus huesos,
y ni uno solo se quebrará.
El Señor redime a sus siervos,
no será castigado quien se acoge a él. R.
Monición al Evangelio (Juan 7, 1-2. 10. 25-30)
El texto evangélico de hoy evidencia la división de opiniones que suscitaba la persona de Jesús. Dispongámonos a escuchar este Evangelio, que nos va preparando más fuertemente para las celebraciones del Viernes Santo.
EVANGELIO
Lectura del santo evangelio según san Juan 7, 1-2. 10. 25-30
En aquel tiempo, recorría Jesús la Galilea, pues no quería andar por Judea porque los judíos trataban de matarlo. Se acercaba la fiesta judía de las tiendas.
Después que sus parientes se marcharon a la fiesta, entonces subió él también, no abiertamente, sino a escondidas.
Entonces algunos que eran de Jerusalén dijeron:
—«¿No es éste el que intentan matar? Pues mirad cómo habla abiertamente, y no le dicen nada. ¿Será que los jefes se han convencido de que éste es el Mesías? Pero éste sabemos de dónde viene, mientras que el Mesías, cuando llegue, nadie sabrá de dónde viene».
Entonces Jesús, mientras enseñaba en el templo, gritó:
—«A mí me conocéis, y conocéis de dónde vengo. Sin embargo, yo no vengo por mi cuenta, sino enviado por el que es veraz; a ése vosotros no lo conocéis; yo lo conozco, porque procedo de él, y él me ha enviado».
Entonces intentaban agarrarlo; pero nadie le pudo echar mano, porque todavía no había llegado su hora.
Palabra del Señor.
Oración de los fieles
Presidente: A Dios Padre, que ha enviado a su Hijo al mundo para que todo hombre pueda conocerlo, dirijamos nuestra oración diciendo todos:
Muéstranos tu rostro, Señor.
- Por la santa Iglesia, para que anuncie siempre con fidelidad la novedad y la verdad del Evangelio, para que todo hombre pueda conocer a Cristo y su salvación. Oremos.
- Por el Santo Padre Francisco, para que encuentre fuerza en la presencia del Señor y en la asistencia del Espíritu Santo, para que su magisterio, sus palabras y su vida sean para la Iglesia una guía segura para caminar la vía del por Evangelio. Oremos.
- Por la salvación del mundo entero, para que en este tiempo de Cuaresma, todos aquellos que se han alejado de Dios, al sentir la cercanía de Jesús que les ofrece la salvación gratuitamente, abran sus corazones y se dejen redimir. Oremos.
- Por nuestra sociedad, enferma de un exacerbado individualismo que hace al hombre presuntuoso en su autonomía y en su saber, para qu pueda ser sanada por la humildad de quienes buscan construir su vida sobre la base de la escucha y del respeto de los hermanos. Oremos.
- Por los que sufren persecución religiosa en el mundo, para que el sacrificio de la vida y el testimonio de fe de quienes aún hoy son asesinados por ser cristianos sacuda las conciencias y estimule a los creyentes a vivir la fe con radicalidad y en la verdad. Oremos.
- Por todos nosotros, para que, valorando el sacrificio de Jesús, que dio su vida por nuestra salvación, busquemos a Dios con rectitud de corazón y dejemos la vida de pecado. Oremos.
Presidente: Escucha nuestra oración, Señor, y a los que te buscan con corazón sincero, concédeles poder conocer tu amor y tu salvación. Por Cristo nuestro Señor. – Amén.
Presentación de las Ofrendas
Ofrezcamos, con los dones de pan y vino, nuestros corazones para que Dios los transforme cada día más.
Comunión.
En la etapa final del camino cuaresmal, Cristo sigue ofreciéndose en su cuerpo y su sangre para fortalecernos y prepararnos para la Pascua definitiva con Él. Acerquémonos a recibirle.
Final
Queridos hermanos, que cerrar la cuarta semana de Cuaresma, la participación en estos sacramentos nos motive a vivir coherentemente con nuestro ser cristianos y ajustemos nuestra vida a la Palabra que hemos escuchado hoy. Vayamos a hacer vida el Evangelio.
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Fuentes: Caballero, B., La Palabra cada día, Ed San Pablo, Madrid, 1990; Aldazábal, José, Enséñanos tus caminos 3 La Cuaresma día tras día, Centro de Pastoral Litúrgica, Barcelona, 2003; Monjas Agustinas de los Cuatro Santos Coronados, Oración de los Fieles Tiempo de Cuaresma y Pascua, Ed San Pablo, Bogotá, Colombia.