El Joven Arrogante
La ciencia avanza cada vez más, a pasos agigantados, y se dice que hay grandes descubrimientos que no salen a la luz pública por no causarnos ya más pánico del que las guerras y diferentes confrontaciones sociales nos ofrecen todos los días. Hay cosas que eran inimaginables en la época de los 80´s; ahora nos hemos acostumbrado tanto a ellas que ya no nos asombran tanto. ¿Pero quienes hicieron eso posible? ¿Cuál es el siguiente paso? ¿Cómo será la tecnología dentro de 10, 15… 30 años?. Ha sido tan repentino el cambio y tan rápido, que las nuevas generaciones tienden a ver con menosprecio a los ancianos, por haber crecido en una época en «subdesarrollo» tecnológico. Leamos esta interesante anécdota para ilustrar esta realidad y sacar nuestras conclusiones:
Durante una conferencia sobre las grandes diferencias entre generaciones, un presumido estudiante se tomó la molestia de explicarle a un señor mayor sentado junto a él, el por qué le es imposible a la Vieja Generación comprender a los jóvenes:
«Usted creció en un mundo diferente, realmente casi primitivo», dijo en voz lo suficientemente alta para que lo escucharan alrededor.
«Los jóvenes de hoy crecimos con televisión, Internet, teléfonos móviles, aviones a reacción y viajes al espacio. Nuestras sondas espaciales han visitado Marte. Tenemos naves con energía nuclear y automóviles eléctricos, de hidrógeno o que funcionan mediante energía solar. Hemos crecido con computadores con capacidad de procesamiento a la velocidad de la luz… y muchas cosas más».
Después de un breve silencio el Señor Mayor respondió diciendo:
«Tienes razón, joven, nosotros no tuvimos esas cosas en nuestra juventud… ¡por eso tuvimos que inventarlas!
Ahora dime, arrogante joven, ¿Qué estás haciendo tú en beneficio de la próxima generación?” ¡El aplauso fue atronador!
Moraleja
Los niños y jóvenes tienen ahora la oportunidad de disfrutar de todos los beneficios que la tecnología les ofrece. Uno se sorprende cómo los niños aprenden a usar con tanta facilidad los teléfonos móviles, tablets o computadoras. Adquieren conocimientos con tanta facilidad que pareciera que ya vienen con un chip incorporado. Son otros tiempos, definitivamente que sí. Pero esa tecnología mal utilizada adormece, entorpece, hace avanzar y retroceder al mismo tiempo. Los niños, adolescentes y jóvenes, si no son bien orientados, desperdician un tiempo valiosísimo haciendo mal uso de la tecnología y perdiéndose en el ciberespacio, como en las redes sociales. Dedican tanto tiempo a las redes sociales que descuidan su propia formación, están como alienados, esclavizados, perdiendo su tiempo. Pero hay jóvenes que sí aprovechan bien su tiempo, lamentablemente son muy pocos, pero vale la pena mencionar el caso muy publicado ya en diferentes medios de comunicación, sobre Sabrina Gonzalez Pasterski, la joven de 23 años considerada la ‘nueva Einstein’, y el caso curioso en esta joven prodigio es que no usa redes sociales!.
Cuando tenía sólo 10 años comenzó a tomar clases para aprender a volar aeronaves y a los 14 terminó su propio avión. Así, se convirtió en la mujer más joven en construir y volar su propia aeronave.
Estudia un doctorado en Harvard y se encuentra investigando la relación espacio-tiempo, los agujeros negros y la naturaleza de la fuerza gravitatoria. Forbes la nombró una de las jóvenes más influyentes con menos de 30 años. Amazon le ofreció un empleo en las empresas Blue Origin, dedicada al desarrollo y producción espacio, mismo que rechazó para centrarse en sus estudios. Es una joven alejada de las redes sociales, pero tiene un blog para motivar a los jóvenes para que, conociendo su caso, se inspiren y usen bien su tiempo y capacidad intelectual.
Jóvenes, más que presumir el lujoso acceso a tanta tecnología, hay que aprovechar bien el tiempo para dejar también a las nuevas generaciones un buen legado. Las redes sociales pueden brindar un buen servicio, si hacemos buen uso de ellas, pero cuando se vuelven una adicción y perdemos mucho el tiempo en ellas, vaya que sí hacen mucho daño…
